La escuela católica es para la Iglesia un lugar privilegiado para el anuncio de la Buena Nueva de Jesús, en donde todos los miembros de la comunidad educativa están llamados, como “discípulos, y misioneros” a seguir al Señor y practicar los valores del Evangelio.

Nuestro liceo desea ser un espacio de evangelización, y ese es su especial cometido, junto con lograr que nuestros y nuestras estudiantes alcancen una excelencia académica, se preparen para la vida y se comprometan a construir una sociedad más justa, fraterna y solidaria.

El presente Proyecto Educativo Evangelizador Viatoriano (PEEV) es el resultado de una historia de más de 60 años de los viatores al servicio de la educación en Chile y de un trabajo en conjunto de estos últimos años, de todas las comunidades educativas de nuestros centros educativos viatorianos, especialmente de los rectores y equipos directivos.

Es un texto que describe los elementos fundamentales de la visión, gestión y desarrollo pedagógico y pastoral de nuestros colegios.

Este documento se hace cargo de las nuevas realidades y contextos socio-políticos, culturales y eclesiales que emergen en nuestra sociedad, animando a los estudiantes, apoderados, profesores, asistentes de la educación y equipos directivos a comprometerse con pasión en cada una de sus responsabilidades y tareas y a enfrentar los desafíos con ilusión y esperanza.

En consecuencia, este marco, que ilumina la labor pedagógica e indica el camino que favorecerá la educación integral de nuestros y nuestras estudiantes, se dirige a todos los que formamos parte de una comunidad educativa viatoriana. 

Este proyecto nos sitúa frente a los sueños y metas que nos inspiran y en la acción que concreta nuestros esfuerzos y misión educativa de formar y acompañar en la fe, a niños, niñas y jóvenes en su desarrollo hacia la madurez humana y cristiana. 

Finalmente, podemos afirmar que en nuestro proyecto educativo, Cristo, el Hijo de Dios, que ha asumido plenamente nuestra humanidad, es el fundamento que da sentido a todo nuestro quehacer educativo, capacitando a todo varón y mujer para pensar, querer y actuar según el Evangelio, haciendo de las bienaventuranzas la norma de su vida. 

Que Nuestra Señora de la Gracias nos proteja y aliente en nuestro camino, que nuestro patrono San Viator inspire nuestras actitudes y opciones y que nuestro fundador el P. Luis Querbes, con el ejemplo de su vida, nos enseñe a discernir los signos de los tiempos que van revelando lo que Dios quiere de nosotros.

Fraternalmente en el Señor,
P. Marcelo Lamas Morales, c.s.v.
Superior Provincial